Por fin te conozco, Chicago!

Hola!
Este fin de semana ha estado lleno de imprevistos...
El viernes empecé a notar molestias al tragar... Oh-oh!! Estaba bien, era solo un pequeño dolor, aunque cuando llegó la noche empecé a sentirme mucho peor. Se lo dije a mis HP y me dieron ibuprofeno, que me calmó un poquito para poder dormir.

Lo peor llegó el sábado. Me levanté fatal, mareada, con un malestar por todo el cuerpo horrible y me dolía taaanto la garganta que casi no podía hablar! Noooo!! Mi pesadilla se estaba haciendo realidad. No quería ponerme mala en EEUU y menos este fin de semana, que la familia quería llevarme a Chicago para que, por fin, conociera la ciudad... Los HP me vieron tan mal que me llevaron al médico. Aquí es taaan diferente a España... En España, como con la Seguridad Social la sanidad es gratuita, te puedes tirar toda la mañana en el médico porque está lleno de gente que va por tonterías (la mayoría)... Aquí eso no pasa, ni pasará en la vida. Aquí el médico es carísimo y la gente solo va si es grave o si está fatal, pero no por un grano... Así que estaba vacío! El sitio tampoco es como en España. Aquí el médico está en locales donde a parte del médico, puedes encontrar cualquier cosa... una especie de supermercado... bueno, también hay otro tipo de clínicas y hospitales, pero al médico que yo fui era de este tipo. Al fondo del "supermercado" te encuentras una puerta con una maquinica que te pide los datos y enseguida sale el médico y te llama. La farmacia está al lado de esa puerta en un mostrador donde te atienden amablemente antes de apuñalarte con el precio; el médico le pasa directamente la receta al farmaceutico y pone los datos (nombre del paciente, nombre de la medicina, duración y toma del tratamiento...). Todo muy "americano", pero una broma así puede costar alrededor de 100 dólares... En resumen, el médico (médica en este caso) me trató muy amablemente y me dijo que tenía una infección de oído y al tomarme la temperatura resultó que ¡tenía fiebre! Ufff, ya decía yo que me sentía mal... Me mandó antibiótico e ibuprofeno y gracias a eso y a que el sábado descansé y tomé muchas bebidas calientes, hoy estaba muchísimo mejor!! También me dio muchas fuerzas hablar con mi familia y mi novio por Skype. En estos momentos es cuando más los necesitaba, pero aunque no los pueda tener aquí, el hecho de poder hablar con ellos me da una tranquilidad enorme. Fue muy reconfortante verlos y hablar con ellos :)

Hoy me he levantado con mucha energía. Anoche se atrasaron los relojes una hora. A las 7:15 de la mañana ya entraba un sol radiante por la ventana. Me ha sorprendido que a partir de ahora anochece ¡a las 4:30! Pero si en España esa es la hora de la siesta!!!!! jajajaj Son muchos los cambios que estoy viviendo!

Como hoy me encontraba mejor, cuando he bajado a desayunar me han preguntado si quería conocer Chicago o prefería descansar... Eso me ha terminado de activar y claramente he optado por ¡Chicago!

He de decir que Chicago no tiene nada que envidiarle a NYC. Nueva York para mi es un sueño, y hubiera dado lo que fuera por vivir mi experiencia allí, pero al ver Chicago me he sorprendido muchísimo!! Todavía llevo en el cuerpo la adrenalina de verme sobre la ciudad desde el observatorio John Hancock. Increible, sin palabras! Aunque primero voy a contar como ha sido todo!

Hemos ido los 6 en el coche (el monovolumen es de 7 plazas, me encanta!). Desde Highland Park a Chicago hay alrededor de media hora o un poquito más, pero se hace muy corto el camino.
En el momento en el que he visto la ciudad de fondo me ha entrado por dentro un cosquilleo! Es como cuando íbamos a la playa y cuando estábamos llegando se veía el mar en el horizonte, pues esto ha sido parecido pero en vez de el mar se veían los rascacielos (qué pena que en las fotos no se pueda apreciar del mismo modo que lo he vivido yo).

Al entrar a Chicago hemos pasado por el estadio de Baseball más famoso de EEUU, donde queda pendiente ver un partido en directo!!



Cuando hemos llegado hemos aparcado a las afueras y hemos buscado un sitio para comer algo. Después hemos cogido un tren que nos llevaba al centro, donde están los rascacielos (aquí los llaman "towers").

Ha sido una pasada ver en con mis propios ojos todo lo que había estado viendo por internet estos meses atrás. No podía creerlo. Este es el río de Chicago. Por él pasa un minicrucero que te muestra toda la ciudad. Tiene que ser alucinante, pero eso queda reservado para el verano!




 


Como en NYC, los edificios no tenían fin, mi cuello no daba a basto de lo altos que eran los edificios. Me sentía como en una nube! Los HP disfrutaban viendo mi cara de felicidad, asombro... ¡estaba flipando!

Hemos ido a dos de los observatorios más famosos, el primero ha sido el Sky Deck, que no hemos podido subir, ya que había tanta gente que teníamos que hacer una cola de 1h30min, así que como íbamos con los niños y a los 5 minutos ya están renegando, hemos decidido dejarlo para otro día!! Queda pendiente, porque ahí salen fotos espectaculares!!!

El otro al que hemos ido ha sido al observatorio John Hancock, también bastante famoso y con unas vistas increíbles. Me han dejado impresionada y no podía hablar, esta vez no por el dolor de garganta (que si no llega a ser por él hubiera pensado que era un sueño), sino porque no me salía ninguna que definiera lo que estaba sintiendo... Ha sido tan bonita la experiencia...!





Desde allí he podido ver toda la ciudad e incluso, allí donde señalo, se intuía Highland Park (tampoco vivo tan lejos!)

Ha sido una verdadera pasada!!
Por cierto estos edificios de la izquierda eran ¡aparcamientos!

Después hemos seguido viendo la ciudad y yo seguía flipando...

Y qué mejor manera que terminar la visita con un buen chocolate caliente!! Hemos entrado a un local donde sólo servían y vendían chocolate! De todos los colores, de todos los sabores, tamaños y formas!! Me ha encantado mi primera visita a Chicago, ha sido una verdadera maravilla!! Y lo mejor es que tengo un año entero para repetir!!! :)

Un abrazo!
Seguiré informando!